27/8/07

El Otro


Para comprender mejor este artículo, les invito a leer el primer texto de este blog, titulado "La Otra" que trata básicamente de las amantes.


Dicen que las mujeres pueden tolerar una infidelidad mas fácilmente que los hombres... nunca me ha gustado generalizar ya que cada cabeza es un mundo. Pero estamos de acuerdo en que cuando una mujer es infiel, de alguna manera hiere "el ego masculino" de su pareja. Ante esta situación cada hombre reacciona de diferente manera.
Pero: ¿por que existen los otros, los amantes?. Esta claro que la mayoría de las mujeres no esta dispuesta a confesar una infidelidad por los prejuicios sociales, mas que por miedo a perder a la pareja. Si una mujer es infiel, se gana automáticamente una serie de adjetivos no tan calificativos como "zorra", "perra", "adúltera" y un largo etcétera.
Y sin embargo lo hacen, y mucho.
Por otro lado, ningún ser humano esta dispuesto a "compartir" a su pareja. Hay mujeres y hombres posesivos, y a la mayoría de las personas les molestaría dormir solos (o solas) sabiendo que su pareja está haciendo el amor con otra persona. Sin embargo, hay muchos hombres que se aventuran a mantener una relación secreta con una mujer casada... y algunas relaciones de este tipo pueden durar años, o hasta toda la vida (conozco casos).

Las mujeres casadas que buscan a otro hombre, a otra compañía aparte del esposo, a un amante, lo hacen por diversas razones. Están cansadas de hacer de sirvientas en la casa desde que llegan del trabajo; pasan todo el día en una oficina y luego tienen que llegar a cocinar y/o planchar la ropa, para "atender" a ese individuo a quien una vez juraron amor y fidelidad de por vida. Estas mujeres pasaron cinco años o mas en una universidad, tienen un trabajo estable, pero se ven lavando ropa y cocinando como unas esclavas... ¿y para que?, para que ese individuo que duerme con ellas les diga: "a mi mamá le queda mejor el guiso", "esta camisa quedó mal planchada", "no tengo interiores limpios", "¿otra vez vamos a cenar eso?"... etc, etc, etc.
Hay otras mujeres que tienen mas "suerte" ya que se han abocado tanto a su trabajo que pueden darse el lujo de contratar una mujer de servicio que haga ciertas tareas... sin embargo no se desliga por completo de la esclavitud, ya que la empleada doméstica no está a disposición las 24 horas, y aunque no le toque cocinar y planchar tiene que hacerse cargo de las compras, organizar la casa, y sobre todo tratar bien a un ser terrorífico: La Suegra.
Y también hay mujeres que aunque estudiaron un post-grado o solo terminaron la primaria, invariablemente "deciden" quedarse en casa por los hijos (aunque estos sean unos tipos de mas de 20 años). Sus vidas se limitan a las patéticas tareas del "ama de casa" y muchas de ellas desarrollan una capacidad extraordinaria para evitar el suicidio y para el auto engaño: se hacen creer ellas mismas pensando que su vida es perfecta.
Y sea como sea esto trae agotamiento físico, el cual se refleja en el organismo... y con los años los esposos no solo dejan de hacer cumplidos, sino que se vuelven hirientes aveces.

Pero en algún momento estas mujeres conocen a alguien especial. Puede ser un compañero de trabajo, un vecino, el amigo de un amigo... eso no importa. Puede ser un hombre atractivo, aunque en muchos casos, la realidad es que el esposo tiene poco o nada que envidiarle físicamente a "el otro". Es que en estos casos la mujer no busca un modelo, un hombre atractivo ni un dios griego; solo buscan a un hombre que esté con ellas sin pedir nada a cambio, sin pedir que le cocinen algo especial, sin reclamar porque la ropa quedó mal planchada o porque hay cierto desorden creado por ellos mismos.
Actualmente algunas mujeres mantienen una relación paralela a su matrimonio... no hay manera de establecer algún tipo de estadística o porcentaje ya que hay mucho silencio al respecto.

Estas mujeres, van a su trabajo y realizan las tareas domesticas que le toque según el caso, y lo hacen de manera automática. Entendieron que "ellas están para eso", y no les importa. Los comentarios de sus esposos ya no son tan hirientes; aunque la suegra no deja de ser un ser despreciable, ya no resulta tan molesta como antes porque de alguna manera.
"El esposo" esta para pedir el almuerzo, para criticar el trabajo de la empleada doméstica (culpando de alguna manera a la esposa, por su puesto). El esposo está para acumular ropa sucia, para quejarse, para criticar, para exigir... y ya no importa.
No importa que el esposo no sea una grata compañía, que no sea capaz de dar algo sin exigir, que no se comporte a la altura en la cama, que no sepa hacer cumplidos... para todo esto está el otro.

2 comentarios:

Miroslav Panciutti dijo...

Ningún ser humano esta dispuesto a "compartir" a su pareja. Esta frase expresada así, como lo haces, merecería mucha discusión. Puedo aceptarla en los términos en los que la has escrito: con un "su" claramente posesivo. Entonces, sería equivalente a decir: nadie que se considere dueño de su pareja está dispuesto a compartirla (y estaría de acuerdo). También podríamos decir que si alguien no está dispuesto a "compartir" a su pareja (el propio verbo lo delata), ese alguien se siente dueño de su pareja. Con lo cual, cerramos el círculo tautológico.

Pero, juegos de palabras al margen, admito que las relaciones de pareja incluyen junto al amor otros componentes que, sin serlo, se confunden con éste; y, entre ellos, dos fundamentales: la necesidad de ser amado y la posesión. Si una "pareja" (aunque seguramente éste ya no sería el término adecuado) evoluciona su amor hacia terrenos menos ruines, es muy posible que la frase que enuncias deje de tener sentido.

En cuanto a las razones de las mujeres para tener un amante ... También el tema da para mucho, sobre todo si lo has vivido. De todas maneras, no me parece que vayas muy desencaminado, aunque, claro, habría mucho que matizar. Un saludo.

nadie dijo...

Precisamente ahi esta el detalle: este tipo de relaciones funcionan para las personas que entienden que LOS SERES HUMANOS NO NOS PERTENECEN.
Tienes razón en decir que es algo muy complejo... nadie piensa igual a nadie, mas alla del umbral del sentido común.
No me extiendo mas, tengo pensado escribir varios artículos sobre este tema.